Lo primero que me sorprendió por la falta de costumbre es ver la catedral vieja sin la compañía de la nueva, que se construyó entre los años 1513 y 1733. Se puede ver perfectamente el recorrido que hace la muralla “nueva” y sus diversas puertas de las que hoy no queda rastro. La puerta del Río o de Anibal puerta de Sancti Spiritus, de Toro, de Zamora… entre otras. También se aprecian las construcciones que fueron destruidas por la riada de San Policarpo (1626). El Puente Romano con su castillete.
Puerta del Río, de Anibal o de Hércules. J. Laurent 1889-2012 |
En el río vemos una pesquera que parece que conducía el agua a los laterales donde se encontraban dos molinos que a día de hoy siguen en pie; uno, el del margen cercano a la ciudad, restaurado y convertido en hotel-restaurante-casino, y el otro abandonado convertido en el hogar de una colonia de gatos.
El mismo autor también realizó grabados semejantes de nuetsros vecinos de:
Alba de Tormes
Zamora
Toro
Antiguo molino convertido en hogar de una colonia de gatos. |
El mismo autor también realizó grabados semejantes de nuetsros vecinos de:
Alba de Tormes
Zamora
Toro
Si no fuera por la casa de piedra que sigue semi intacta ni lo reconocería, vaya cambio. Aunque la casa de la entrada me gusta más ahora que la del pasado.
ResponderEliminarMarramiauuu